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martes, 28 de junio de 2016

Galicia

     Hicimos el viaje a Galicia en el verano del 2008, esta vez 15 días. Alquilamos en idealista una preciosa casa recién reformada de piedra en Villagarcía de Arosa.

      Después de mirar en el mapa los sitios que queríamos visitar de Galicia decidimos que éste pueblo estaba en un lugar muy céntrico para quedarnos y desde  allí realizar los desplazamientos.

     Salimos como siempre a las 5 de la mañana, cogimos la vía de la plata y nos desviamos hacia la población de Coria y pasando por la sierra de gata llegamos a Ciudad Rodrigo, ya que allí se cogía  la autovía gratuita la A 25, ahora de pago, que te dejaba al lado de Oporto.



llegando a Ciudad Rodrígo




Ayuntamiento

     Llegamos tempranito a Ciudad Rodrigo y callejeamos un poco por su ciudad amurallada, entramos en la catedral de Santa María, el Alcázar y vimos sus casas palacios.

     En una iglesia estábamos haciendo fotos y salió el cura todo enfadado que no podíamos hacerlas, salimos pitando, que vergüenza, nosotros no vimos por ningún sitio que no se pudieran hacer, para esas cosas somos muy respetuosos.



Catedral


     Ya en Oporto fuimos a ver el estadio de fútbol do dragao, la iglesia y torre de los clérigos, en la que se puede subir y se ven unas bonitas vistas de la ciudad, la catedral de la sé. 



Estadio de fútbol


Torre de los clérigos





El puente de Luis I lo vimos desde un mirador, después  cogimos la A 28 que va paralela a la costa y te deja ya en Galicia. Está también la opción gratis de la carretera nacional.











Llegamos a Tui que está justo en la frontera para ver su catedral gótica.




catedral de Tui





Interior de la catedral





     A medida que nos íbamos adentrando en Galicia no me iba gustando la gran cantidad de casas que había por todos lados, junto a la carretera. No se distinguía muy bien cuando era un pueblo u otro, es lo que menos me gustó de las rías bajas, la masificación de casas.


     Por fin estábamos después de un largo e intenso viaje llegando hasta Villagarcía de Arousa, allí nos recibió la dueña de la casa y nos llevó en su coche hasta el mirador de lobeira para ver desde allí toda la ría por una carreterita estrecha, con curvas y a gran velocidad, qué sudores por dios.






Villagarcía es un gran pueblo que tiene mucho ambiente, en su playa no nos bañamos, era la ría y no nos entró mucho por el ojo.Toda la ría estaba llena de bateas de mejillones.




Playa de compostela


      De allí a destacar el hartón de comer que nos dimos de langostinos, mejillones, almejas de carril y el auténtico pimiento del padrón, éste si los comprábamos en el mercado a una mujer que nos daba los que no picaban tanto, porque algunos pican un montón, el marisco lo comprábamos muy fresco en el mercadona.

     En el mercado al pescado no le ponían los precios, tenías que preguntar y te pedían por él según te vieran si eras turista o no. 

     Allí las iglesias están junto a los cementerios y por cualquier sitio de Galicia te encuentras con los cruceiros.




cruceiro




procesión del barrio que nos quedamos


Ayuntamiento de Villagarcía de Arousa


      En Villagarcía en verano, el 16 de agosto se celebra la fiesta del agua y a nosotros nos tocó la feria del marisco y una exposición en el puerto.

      Los días que no llovía, allí la lluvia en verano es muy finita, íbamos a bañarnos a la isla de Arousa, al agua parecía que le habían echado cubitos de hielo, estaba muy fresquita y limpia, la arena es  muy blanca y algunas playas rodeadas de pinos, como la playa de la A Secada. Había que echarle valor para meterte aunque fuera hasta la rodilla. A la isla se accede en coche por un puente, desde el mirador con do Forno se ven unas vistas de toda la ría de Arousa.


puente isla de Arosa






mirador




     Un primer circuito fue hacia la isla de la toja, primero paramos en Cambados, éste pueblo es conocido como la "Capital del Vino Albariño", hay muchas vides sembradas por las rías bajas, te venden en los vinos en la misma finca.

      En agosto son las fiestas del vino. En Cambados estuvimos un poco callejeando viendo la plaza de Fefiñáns, flanqueada por el pazo de los Figueroa y la Iglesia de San Bieito y  pazos de interés como los de Montesacro y  Bazán, actual Parador Nacional, y también los palacios de los Condes de Maceda.


Cambados


Parador de Cambados


Cementerio Cambados

     Seguimos nuestra ruta hacia la isla de la toja, ya me habían comentado que allí hay poco que ver pero siempre es mejor comprobarlo por uno mismo. 

     Antes de entrar en la isla pasamos por O Grove, primer pueblo de la ría de Arousa, antiguamente era una isla, pero la arena ha formado el istmo de la playa de la lanzada, allí cuando vas pasando vas viendo al lado de la carretera ofertas de mariscadas. Una de las cosas de las que vive el pueblo además del marisqueo es de las bateas de mejillones, ostras y vieiras.

     Cruzando el puente hacia la isla observamos que estaba la ría en con la marea baja y estaba llena de mujeres mariscando.








No sólo las mujeres africanas tienen arte las gallegas también



     La isla de la toja es famosa por sus aguas termales y aparte de la visitada capilla de San Sebastián con la fachada llena de conchas, un campo de golf, tiene varios balnearios, sobre todo para la piel y vías respiratorias y poco más. Como cotilleo en esa capilla se casó Rajoy en 1996.






     Ya desde allí nos fuimos por el otro lado de la costa de O Grove hacia la bellísima playa de la Lanzada, arena blanca, virgen. Desde allí se divisan las islas Ons, hay excursiones para ir a ellas en barco, pero nosotros preferimos ir mejor a las islas Cies.



Playa de la lanzada con las islas Ons enfrente



Otra playa de Sanxenxo


 Siguiendo la costa se llega a Sanxenxo, se nota que es un pueblo muy turístico porque para atravesarlo tardamos un montón, mucho tráfico.



Escultura atlante escultura de bronce de Francisco Leiro







     
     Para terminar nuestra ruta llegamos a Combarro, pequeño pueblo muy turístico a sólo 5 kilómetros de Pontevedra.







      Combarro es un conjunto histórico artístico lleno de hórreos (graneros o despensas) y de cruceiros, hay siete en total, todos los que tienen la figura de Cristo están orientados a tierra y el que tiene la figura de la virgen mira hacia el mar. Los cruceiros son unos monumentos religiosos constituidos por una cruz generalmente de piedra, forma parte del paisaje de Galicia.












     Nuestro siguiente gran ruta fue hacia Vigo, nos levantamos muy temprano para coger allí a primera hora el barco hacia las islas Cíes. Aparcamos el coche en un centro comercial que está justo al lado del puerto.







     El archipiélago está formado por tres islas, siendo la playa de rodas, la mejor playa del mundo, yo no sé si será, pero bonita si que es yo me harté de bañarme en sus aguas limpias y cristalinas, estaba fresquita el agua pero sin cubitos de hielo, enseguida que te metes en el agua te hundes, es profunda, tenerlo en cuenta para los peques pero muy limpia y transparente, se ve perfectamente el fondo del mar.

      El fondo estaba lleno de conchas de vieiras, está prohibido sacarlas de la isla, pero yo no pude a la tentación y me traje una y un pelín de arena blanca, que no se entere nadie.











     Tener cuidado con las gaviotas, te roban todo lo que pueden, comida, bolsos.

      Cuando compras el billete de ida y vuelta del barco tienes que elegir la hora  en la que quieres volver, porque claro la isla está repleta de gente, así te aseguras sitio. Te daban una bolsa para que metieras la basura y tienes que volver en el barco con ella, es mejor llevarse la comida. Nosotros cogimos sobre las 4 de la tarde la vuelta, porque nada más que íbamos a la playa, aunque puedes hacer senderismo por las islas.



Las ladronas de la isla jajaj

Allí hay un camping que realizan muchas actividades.



Al fondo se ven las tiendas de campaña del camping



     Después de regresar de las Cíes nos fuimos por la carretera de la costa pasando por Baiona hacia la Guardia, justo en la desembocadura del río Miño, por esa parte hay muchos acantilados.




desembocadura del Miño, abajo España, arriba Portugal



El tramo final de la desembocadura, una isla que se ve enmedio pequeñita fue una cárcel


Vistas de A Guarda desde el monte Santa Tecla



     Queríamos allí ver el castro, poblado galaico-romano, declarado monumento histórico artístico situado a 341 m de altitud y el monte de Santa tecla. Desde allí se ven unas vistas espectaculares de la desembocadura del Miño.

     No os preocupéis que se puede subir en coche hasta todo lo alto, cuesta barato 1 euro tarifa normal, lo que pasa que una vez allí hay que subir y bajar unas cuántas escaleras. Nosotros subimos primero al monte de Santa Tecla y luego bajando paramos en el castro.














http://www.galiciamaxica.eu/pontevedra/santa-tecla/



restos del poblado





reconstrucción de un castro





Y ya de vuelta para casa a descansar.


     Siguiente ruta que elegimos fue a  Santiago de Compostela, estaba lloviendo cuando llegamos, la ciudad me resultó triste, claro que el día no acompañaba, pero parecía que sólo llovía en la ciudad y no alrededor. 

     La catedral es la meta final de los peregrinos cristianos a la tumba de Santiago Apostol.







 
    Dentro de la catedral vimos que la gente hacía cola y nos pusimos también , resulta que era para subir al camarín donde estaba el apostol Santiago y según me indicó el cura que había allí había que abrazarlo, por lo visto es el ritual que siguen los peregrinos cuando llegan. Yo pienso que nosotros aunque llegamos en coche también lo erámos, o no?.




Así hay que hacerlo como don Felipe




     En la plaza del obradoiro se encuentra el Hostal dos Reis Católicos, mandado a construir por los reyes católicos para atender a los peregrinos y enfermos. Hoy es un hostal de 5 estrellas, aunque se puede visitar pagando o bueno si te lo puedes permitir hospedándote en él.







http://www.santiagoturismo.com/monumentos/hostal-dos-reis-catolicos







     Allí nos dimos una vuelta por todo el alrededor de la catedral, sus calles totalmente llenas de peregrinos y compramos las típicas brujitas. Yo compré la de la salud.








     Luego cogimos dirección la costa de la muerte. Allí paramos para ver la cascada del monte Pindo, en Ézaro, la cascada del río Xallas, es espectacular y eso que era verano, es la única cascada de Europa que cae directamente al mar, con una caída de unos 80m. Justo al lado del aparcamiento hay una subida que llega a un mirador.












     Paramos también en la ciudad de Corcubión, estaba la  feria medieval, nos dieron los olores de la comida y por unanimidad decidimos comer allí y ya no paramos hasta llegar al fin del mundo, Finisterre. 

     Por la carretera iban algunos peregrinos andando, por lo visto este era el auténtico final según algunos historiadores, el Finis Terrae romano. Finisterre está a 88 kilómetros de Santiago de Compostela y por allí también hay muchos albergues a lo largo del camino.









faro finisterre





Cómo veis no sé ve nada, lo dicho el fin del mundo jajaja










     Seguimos por la costa de la muerte hasta La Coruña queríamos ver principalmente la torre de Hércules, patrimonio de la humanidad, el faro más antiguo del mundo,ésta era lo último que veían los viajeros cuando se iban en barco rumbo América.






    
     Allí se estaba muy bien, fresquito, nublado y muchísimo viento, muy buenas vistas, allí van para volar las cometas.














     De La Coruña debo de decir que me impresionó, no me la esperaba así, me pareció una ciudad muy señorial, qué pena qué no teníamos mucho tiempo para disfrutarla, otra vez será.

     Allí fuimos a ver la ciudad deportiva y la playa de Riazor. Y ya de vuelta a casa por la autopista, mucho más rápido.












     Otro sitio al que fuimos fue a pasar el día al parque natural de las dunas de corrubedo, en el municipio de Ribeira, entre las Rías de Arousa y la de Muros-Noia, allí se encuentra la duna móvil de 1 km de longitud, 250 m de anchura y 20m de alto. Vaya pedazo de playa virgen, tienen allí un museo, buen sitio para pasar el día relajados y darse un bañito.














     Una excursión de una mañana fue hacia otra cascada pero esta vez en el interior. La cascada del Toxa en Silleda, está en un sitio con una gran vegetación, tiene merenderos para pasar el día y un sendero paralelo al río que te lleva hasta el Monasterio de San Lourenzo de Carboeiro.




Desde el mirador










bajando por el sendero hacia la base de la cascada



Aquí se ven los merenderos para comer








sendero junto al rio


Final del sendero, el monasterio



     Y ya para terminar la última excursión que hicimos fue hacia la ciudad de Orense, había leído sobre sus famosas aguas termales y aunque era verano me apetecía ir a verlas. La ciudad la vimos desde el coche porque fuimos directos a las termas, las hay gratuitas a lo largo del rio Miño con casetas para cambiarse, pero nosotros fuimos a unas de pago, en aquél entonces costaban 3 euros.




Dentro de las termas

http://www.termaschavasqueira.com/



      Había que ducharse en pelotas, yo me negué, no me iba a poner allí delante de extrañas en cueros, así que una buena ducha en biquini y para dentro. Hacías un circuito, agua muy caliente, templada y congelada. Allí echamos un buen rato muy a gusto la verdad. El enclave de la ciudad de Orense está muy bien pero creo que es la provincia de Galicia que tiene más temperatura en verano.






     Luego si quieres después de salir de las termas puedes tomar el sol o incluso comer junto a la orillas, está muy bien, con mucha sombra y césped.




orilla del rio


     Pues nada ya después de habernos hartado de marisco, pimientos y probar el albariño transcurrieron nuestros 15 días en Galicia. Así que cogimos dirección León, aunque paramos un momento en la catedral de Lugo. Se me saltaron las lágrimas al ver muchos peregrinos, algunos les faltaban las piernas, etc. Desde luego me gustaría tener su fe. Qué sacrificio más grande.




murallas de Lugo




Catedral de Lugo


 También para ver el castillo de Ponferrada que me gustó más por fuera que por dentro .













     
     Después siguiente parada, La catedral de Santa María, el palacio de Gaudí de Astorga. Llegamos a muy mala hora a Astorga era mediodía y acababan de cerrar los monumentos, así que los vimos por fuera, comimos y nos fuimos dirección León.




















     En León nos alojamos en un hostal en pleno centro que tenía muy buenas críticas. El sitio se veía muy tranquilo pero cuando llegó la noche empezaron a poner veladores y llenaron toda la calle, menos mal que íbamos reventaos y no nos importó el ruido.

     León tiene un centro muy atractivo, teníamos muchas ganas de conocer la catedral y sus famosas vidrieras, preciosa.












http://www.turismoleon.org/turismo/catedral-de-leon.php








      Estuvimos paseando y comiendo por el barrio húmedo, junto a la catedral, allí se encuentra la zona de tapeo, qué rico el pulpo, lo habíamos probado en Galicia, pero nos gustó mucho más aquí.


http://www.turismoleon.org/turismo/barrio-humedo.php


     También está allí el conjunto románico de la basílica de San Isidoro y por supuesto el convento de San Marcos, antiguamente era un templo-hospital para los peregrinos del camino de Santiago y actualmente es el parador.


















     Al día siguiente y después de haber disfrutado de la ciudad de León seguimos nuestro camino para casa, pero antes una paradita en Mérida

     Allí entramos para ver su teatro, el anfiteatro romano y el acueducto de los milagros.


















Y esto es todos amigos, fin de un largo y apasionante viaje

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