Comenzamos un nuevo viaje, habíamos estado ya en Mallorca y
nos habían encantado sus calas, leímos que en la costa brava también eran igual
que en la isla. Pero pudimos comprobar cuando llegamos que aunque tiene unas calas muy bonitas suelen ser casi todas
de piedras, no tienen nada que ver con la arena blanca de Mallorca.
Esta vez dividimos el viaje así: una noche en Madrid, una semana en el pueblo de L’Escala, Gerona y una semana en Alcossebre, Castellón.
Las fotos que aparecen aquí no son mías porque se nos estropeó la cámara y perdimos las fotografías y sólo pudimos hacer vídeos, en fin esas cosas pasan.
Esta vez dividimos el viaje así: una noche en Madrid, una semana en el pueblo de L’Escala, Gerona y una semana en Alcossebre, Castellón.
Las fotos que aparecen aquí no son mías porque se nos estropeó la cámara y perdimos las fotografías y sólo pudimos hacer vídeos, en fin esas cosas pasan.
Queríamos ir a ver la Warner Bros por lo cual desde Sevilla
nos fuimos directos para el parque y ya por la tarde fuimos al hotel en Getafe,
el holliday inn exprés, os pongo el nombre del hotel porque tiene una buena
situación y a la mañana siguiente para ir para Gerona estábamos justo al lado
de la M50.
Como siempre en nuestros viajes nos gusta parar en alguna
ciudad, esta vez tocó Zaragoza, para no perder tiempo aparcamos en un parking subterráneo
justo al lado de la Basílica del Pilar, en realidad era lo queríamos ver.
Sales del parking
directamente a la plaza del Pilar, también llamada plaza de las catedrales,
tiene dos, la SEO o Catedral del Salvador y la Catedral de la Basílica del
Pilar. En esta plaza inmensa está la Fuente de la Hispanidad, la bola del
mundo, La lonja, el Ayuntamiento, etc. La plaza es peatonal y tiene unas
esculturas de bronce.
Dentro de la Basílica del Pilar, que es un lugar de peregrinación, está la columna que dicen que trajo la Virgen María a Zaragoza para animar a Santiago a propagar el cristianismo. La Virgen es muy pequeñita.
Detrás de la Basílica pasa el río Ebro, allí se encuentra su
puente de piedra desde el cual se tienen unas vistas de la catedral por detrás.
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| Vista de la basílica del Pilar desde el puente de piedra |
Una vez instalados en el apartamento de l’Escala, allí casi
todo el mundo habla o catalán o francés, empezamos a movernos por la zona. El pueblo tiene varias playas, Cala Montgó, la de Empuries y la de Riells en la que está prohibido fumar. Su paseo marítimo está dedicado a el pequeño príncipe d'Antoine de Saint-Éxupery.
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| Monument a la cobla |
Justo al lado de l'escala se encuentran las ruinas de Empúries, están situadas en Sant Martí
d’Empúries. Se trata del único lugar donde se concentran al mismo tiempo una
ciudad y una factoría griega, un poblado de los indigetes y una ciudad romana.
Tiene una buena playa para bañarse, tienes acceso desde la misma ruina. Un lugar privilegiado, no eran tontos al elegir la ubicación. La ubicación es como Bolonia en Cádiz, a pie de playa.
La parte de la costa brava está llena de turistas, franceses sobre
todo. Una de las cosas que más me gustaron fueron los campos de girasoles
que se veían por todos lados y lo que menos me gustó es que por las carreteras
secundarias había chicas alegres de la vida sentadas en sillas, esperando la
clientela. Era muy desagradable verlas allí por lo menos para mí, a pleno día y
con las escasas indumentarias que lucían.
Un recorrido muy bonito es ir hacia el precioso pueblo de Empuriabrava, está lleno de canales, casi 25 kilómetros, aparcas el yate en la puerta de tu casa. Hay barcos que te dan un paseo por sus canales, está en el golfo de Roses, es la Venecia española, no es lo mismo que la otra Venecia pero da el apaño. Está en pleno golfo de rosas y desde allí se ve la ciudad de Roses.
Desde allí tomamos dirección Cadaqués, pequeño pueblo pesquero,
allí tenían la residencia de verano la familia de Dalí y también era visitado el pueblo a
menudo por muchos pintores.
Desde allí se accede a Portlligat, una pequeña cala en pleno cabo de Creus donde se encuentra la casa museo de Salvador Dalí. Un pueblo escondido y muy pequeñito, lleno de turistas, la carretera va por un sitio precioso por el que se puede admirar todo el golfo de Roses.
Desde allí se accede a Portlligat, una pequeña cala en pleno cabo de Creus donde se encuentra la casa museo de Salvador Dalí. Un pueblo escondido y muy pequeñito, lleno de turistas, la carretera va por un sitio precioso por el que se puede admirar todo el golfo de Roses.
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| Cadaqués |
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| Portlligat, casa museo Dalí |
Después de visitar cadaqués en vez de volver por la misma
carretera nos fuimos hacia Port de la Selva, un pequeño pueblo de pescadores
situado en el cap de creus, allí desde la carretera se divisa en todo lo alto
el monasterio de Sant Pere de Rodes.
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| Monasterio |
Cogimos la carretera dirección Figueras para volver a l'Escala, antes de llegar a mano derecha según bajas se encuentra Peralada, el pueblo medieval vitivinícola más céntrico de la Empordà. Durante la edad media fue una de las
ciudades más importantes, con su castillo del S.XIV.
En Figueras es donde está el museo Dalí, a nosotros no nos
dio tiempo pero a quien le guste Dalí es una visita muy recomendable, pasamos por la misma puerta y vimos el museo por fuera.
Para quien le apetezca recorrer un poco más de camino por la carretera dirección Olot
se encuentra Besalú, otra ciudad medieval en la que destaca su puente románico
que da entrada al pueblo.
Una tarde nos acercamos a la capital Gerona, para llegar al centro hay que atravesar el rio Onyar por uno de sus muchos puentes, desde ellos se obtienen unas fotos muy chulas de las casas colgantes de distintos colores que están en la orilla, olía regular, pero una vez entras en la parte antigua te olvidas del olor y te pones a admirar la ciudad. Una ciudad tranquila que me sorprendió y me gustó mucho.
Tiene dos recintos fortificados: la Força Vella y el ensanche medieval. Destaca su catedral que por cierto ir preparados para subir una gran escalinata y la basílica de Sant Feliu. También posee un barrio judío y plazas porticadas, baños árabes, a nosotros nos gustó mucho Gerona, por lo menos la parte histórica, la moderna la vimos desde el coche. Merece la pena visitarla.
Otra visita que hicimos fue una que nos recomendó un vecino, Carcasonne, Francia, nos dijo que
estaba muy cerca de allí, cerquísima a 193 Km, la verdad que aunque fue un
paseíto largo mereció la pena, es un pueblo medieval todo fortificado, se
conserva muy bien.
El paso del pirineo por allí no es muy bonito, primero porque era verano y no había nieve y segundo porque por allí están los picos más bajos del pirineo.
Me sorprendieron las áreas de descanso de la autopista, con mucha sombra, merenderos, servicios, éstos eran un agujero en el suelo y también nos volvió locos el ruido ensordecedor de las chicharras y mira que en Andalucía estamos acostumbrados a escucharlas pero no tan fuerte.
El paso del pirineo por allí no es muy bonito, primero porque era verano y no había nieve y segundo porque por allí están los picos más bajos del pirineo.
Me sorprendieron las áreas de descanso de la autopista, con mucha sombra, merenderos, servicios, éstos eran un agujero en el suelo y también nos volvió locos el ruido ensordecedor de las chicharras y mira que en Andalucía estamos acostumbrados a escucharlas pero no tan fuerte.
Carcasonne forma parte del camino de Santiago está dividida en
dos zonas la cité o ciudadela y la Bastide Saint-Louis, unidas por el puente
viejo, puente de piedra de 12 arcos.
La entrada a la ciudad es por la puerta Narbona, se aparca
afuera, el parking es bastante caro, la
ciudad es completamente peatonal, había muchísimos turistas, no cabía un
alfiler. Es el coraje que me da todos estos pueblos tan turísticos que están masificados, su interior está lleno de tiendas de souvenirs, restaurantes, con precios algo
caros.
Dentro de la ciudad se encuentra el castillo de Carcasona, para entrar suele haber bastante cola, es de pago, hay un museo en su interior, pero si no quieres entrar ya con pasear por el pueblo no necesitas nada más. Bueno sí que hubiese menos gente. Vendían creps por todos lados inmensas. La Basílica de Saint-Nazaire de estilo gótico si es gratuita y con unas vidrieras impresionantes.
Dentro de la ciudad se encuentra el castillo de Carcasona, para entrar suele haber bastante cola, es de pago, hay un museo en su interior, pero si no quieres entrar ya con pasear por el pueblo no necesitas nada más. Bueno sí que hubiese menos gente. Vendían creps por todos lados inmensas. La Basílica de Saint-Nazaire de estilo gótico si es gratuita y con unas vidrieras impresionantes.
Cuando terminamos allí bajamos a la parte nueva de Carcasonne que también tenía su encanto y era más barato aparcar y comer.
http://paseandohistoria.blogspot.com.es/2009/09/castillo-de-carcassonne.html
Llegó el momento de hacer otra ruta hacia el sur, hacia el
bajo Ampurdán. Llegamos al precioso y pequeño pueblo de Peratallada, es uno de
los pueblos medievales que mejor se conservan, es pequeñito pero merece la
pena perderse por sus hermosos rincones.
Aparcamos en uno de los tres aparcamientos que tiene el pueblo de pago. No olvidéis mirar hacia abajo de vez en cuando, ya que las calles son de piedras y te puedes torcer un tobillo como nos pasó a nosotros y lo peor que era el conductor. Destaca la Iglesia de San Estebán, la plaza porticada de les voltes.
Aparcamos en uno de los tres aparcamientos que tiene el pueblo de pago. No olvidéis mirar hacia abajo de vez en cuando, ya que las calles son de piedras y te puedes torcer un tobillo como nos pasó a nosotros y lo peor que era el conductor. Destaca la Iglesia de San Estebán, la plaza porticada de les voltes.
Un pueblo muy similar también medieval es Monells. Todos
estos pueblos son muy parecidos por no decir primos hermanos de los pueblos de
la Toscana.
Hicimos otra parada en Pals, otro pueblo medieval, en el que había que subir cuestas para llegar a todo lo alto.
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| Esta imagen es de Pals en invierno |
Ya de ahí nos dirigimos hacia Cala Tuna. Para llegar a ella hay que pasar
por el pueblo de Bégur y desde allí llegamos por una carreterita de curvitas a la cala,
pequeñita, agua muy limpia pero de piedras, allí hicimos un sendero que subía
por las montañas y que tenía unas vistas de la costa.
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| Bégur |
Y ya para terminar nuestra ruta es día llegamos hasta Llafranc, más que nada lo que hicimos allí es bañarnos en su playa.
Terminada nuestra semana en Costa brava, queríamos antes de
llegar a Alcossebre, entrábamos en el apartamento por la tarde, hacer una visita relámpago a Barcelona, nos cogía de paso y
había que aprovechar.
Salimos muy temprano para llegar y aparcar en un centro comercial al lado de Barcelona la maquinista, lo había buscado por internet y allí pudimos aparcar gratis el coche y nos sacamos la tarjeta turística para un día y como pasaba al lado el tren pues nada para Barcelona ciudad, lo que pasa que luego nos dio coraje porque al ser domingo había sitio libre dentro de la ciudad. Pero bueno así no nos complicamos la vida con el coche.
Salimos muy temprano para llegar y aparcar en un centro comercial al lado de Barcelona la maquinista, lo había buscado por internet y allí pudimos aparcar gratis el coche y nos sacamos la tarjeta turística para un día y como pasaba al lado el tren pues nada para Barcelona ciudad, lo que pasa que luego nos dio coraje porque al ser domingo había sitio libre dentro de la ciudad. Pero bueno así no nos complicamos la vida con el coche.
Cuando llegamos en el tren al centro cogimos el metro, qué calor en esos túneles, dirección al Camp nou. Ya empezamos a incluir en nuestras visitas los campos de fútbol además de los monumentos. El campo era lo que estaba más alejado, así que después de verlo nos dirigimos en metro hacia la Sagrada Familia, es muy
bonita la catedral pero había una cola tremenda, daba toda la vuelta, así que lo
dejamos pasar no era cuestión de perder tiempo.
Nos fuimos al parque Güell esta vez en autobús, llevábamos unos bocatas para comer allí en el parque, éste es precioso, muchísima gente, músicos tocando por todos lados, la verdad que merece la pena, aunque prepararos para fortalecer las piernas. Ahora creo que lo han puesto de pago, nosotros entramos gratis.
Nos fuimos al parque Güell esta vez en autobús, llevábamos unos bocatas para comer allí en el parque, éste es precioso, muchísima gente, músicos tocando por todos lados, la verdad que merece la pena, aunque prepararos para fortalecer las piernas. Ahora creo que lo han puesto de pago, nosotros entramos gratis.
Después de comer y descansar, es un horror la
calor pegajosa que hace en Barcelona, cogimos un autobús en el parque que
pasaba por la casa batlló, casa Milá. Así
que como si de un autobús turístico se tratara vimos las dos casas, la diagonal, el
paseo de Gracia, hasta desembocar en la plaza de Cataluña y desde allí
recorrimos todo el centro: palau de la música, ramblas, mercado de la
boquería y la catedral que por cierto había varios grupos bailando la sardana, se ve que es habitual bailar en su plaza.
El baile es bonito verlo pero yo como buena andaluza me gusta más ritmo en los bailes.
Una vez terminado el día fuimos en el tren a por el coche y rumbo a Alcossebre.
Allí en Barcelona pasa como en todas las ciudades grandes al ser domingo volvía todo el mundo para dentro, menos mal que íbamos en dirección contraria, porque vaya colas.
https://www.conocerbarcelona.com/
Ya instalados en Alcossebre hicimos alguna que otra visita, además de bañarnos en sus playas. Una fue al pueblo de Morella, recomendado por mi amiga valenciana, pueblo amurallado declarado conjunto histórico artístico, está en todo lo alto su castillo, se accede desde el convento de San Francisco, donde te dan toda la información y se paga la entrada. Hay como tres niveles, así que prepararos para subir escaleras, aunque una vez llegas a todo lo alto las vistas merecen mucho la pena. Dentro de él se puede visitar el convento de San Francesc, allí hay una pintura al fresco que representa la danza de la muerte.
El baile es bonito verlo pero yo como buena andaluza me gusta más ritmo en los bailes.
Una vez terminado el día fuimos en el tren a por el coche y rumbo a Alcossebre.
Allí en Barcelona pasa como en todas las ciudades grandes al ser domingo volvía todo el mundo para dentro, menos mal que íbamos en dirección contraria, porque vaya colas.
https://www.conocerbarcelona.com/
Ya instalados en Alcossebre hicimos alguna que otra visita, además de bañarnos en sus playas. Una fue al pueblo de Morella, recomendado por mi amiga valenciana, pueblo amurallado declarado conjunto histórico artístico, está en todo lo alto su castillo, se accede desde el convento de San Francisco, donde te dan toda la información y se paga la entrada. Hay como tres niveles, así que prepararos para subir escaleras, aunque una vez llegas a todo lo alto las vistas merecen mucho la pena. Dentro de él se puede visitar el convento de San Francesc, allí hay una pintura al fresco que representa la danza de la muerte.
Otra visita obligada fue a Peñíscola, muy buena playa de arena y sobre todo su magnífico castillo, fortaleza donde vivió el Papa Luna. En la subida al castillo hay muchas tiendas de souvenirs. Es un pueblo con muchos hoteles ideal para viajar con niños, tiene mucho ambiente y un buen paseo tanto por la parte medieval del pueblo como por la moderna.
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| Castillo papa luna |
http://www.turismodecastellon.com/629350_es/Pe%C3%B1iscola-lugar-inolvidable-para-un-viaje-familiar./
Y ya la última ruta que hicimos fue a conocer Castellón y
Valencia. Salimos temprano como de costumbre y llegamos al centro de Castellón,
allí nos dimos un paseo por el centro, la calle principal, ayuntamiento y vimos la concatedral de Santa María y la torre Fadrí.
http://www.castellonturismo.com/
Poco más a destacar, cogimos el coche y pusimos rumbo a Valencia, donde aparcamos junto a su famoso mercado central y la lonja de la seda, muy bonitos por dentro y la plaza de la virgen con la catedral.
Allí estuvimos por el centro callejeado un buen rato después nos fuimos hacia la ciudad de las artes y las Ciencias, del famoso arquitecto Santiago Calatrava. Yo creo que he visto casi todas sus obras de España. Es un aquitecto que me encanta. Allí se puede ver el l’hemisfèric, l’oceanogràfic. El sitio es impresionante, precioso. Ya después de recorrer todo aquello nos fuimos de vuelta para Alcossebre.
http://www.castellonturismo.com/
Poco más a destacar, cogimos el coche y pusimos rumbo a Valencia, donde aparcamos junto a su famoso mercado central y la lonja de la seda, muy bonitos por dentro y la plaza de la virgen con la catedral.
Allí estuvimos por el centro callejeado un buen rato después nos fuimos hacia la ciudad de las artes y las Ciencias, del famoso arquitecto Santiago Calatrava. Yo creo que he visto casi todas sus obras de España. Es un aquitecto que me encanta. Allí se puede ver el l’hemisfèric, l’oceanogràfic. El sitio es impresionante, precioso. Ya después de recorrer todo aquello nos fuimos de vuelta para Alcossebre.
Por todo el levante y Cataluña prepárate a soltar dinero por sus
autopistas, aunque está la nacional también pero si no quieres conducir con
mucho tráfico, o sobre todo para volver es más rápido coger la autopista.
Y transcurrida la semana de vuelta a casa a descansar.
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